El movimento SATANICO tradicional podria decirse que comieza con Edward Alexander (Aleister) Crowley conocido como la “Bestia 666”, “Baphometh” o “el hombre más perverso del mundo”, nació el 12 de Octubre de 1875 en Leamington Spa, Warwickshire. Su familia era muy religiosa, dentro de la Iglesia protestante, de la secta de los Hermanos de Plymouth. Crowley es conocido por su faceta dentro del ocultismo. Creó sociedades iniciáticas como Thelema y lideró la OTO, la Astrum Argentum y la Ecclesia Gnóstica. Su doctrina se resumía en una frase literal: “Haz lo que quieras. Eso debe ser la totalidad de la Ley”. Este grupo suele peligroso, ya se les ha involucrado constantemente en secuestros, abusos sexuales e incluso asesinatos.
Actúan principalmente en Los Estados Unidos de Norteamérica y por actos imitativos han llegado a Europa y Sudamérica.Se nutren principalmente de los integrantes del grupo. Suelen exigir ciertas muestras de “fidelidad y dignidad” a través del secuestro de cadáveres, beber sangre, exposición sexual, necrofagia, necrofilia, que van haciendo subir de escalafón lo que va ritualizando cada vez mas al grupo, que cuenta generalmente con un líder el cual termina siendo una especie de sacerdote o gurú quien les estará constantemente exigiendo nuevas pruebas.
Actúan principalmente en Los Estados Unidos de Norteamérica y por actos imitativos han llegado a Europa y Sudamérica.Se nutren principalmente de los integrantes del grupo. Suelen exigir ciertas muestras de “fidelidad y dignidad” a través del secuestro de cadáveres, beber sangre, exposición sexual, necrofagia, necrofilia, que van haciendo subir de escalafón lo que va ritualizando cada vez mas al grupo, que cuenta generalmente con un líder el cual termina siendo una especie de sacerdote o gurú quien les estará constantemente exigiendo nuevas pruebas.
SATANISMO simbolico:
Es una doctrina filosófico-religiosa compilada por Anton Szandor LaVey en La Biblia Satánica. Cuando se escucha la palabra “Satanismo”, la mayoría de la gente se suele imaginar una religión que adora a un dios del mal, lo cual es completamente falso, ya que un satanista auténtico sólo se “adora” a él mismo, no creen en ningún dios sobrenatural, sea este bueno o malo. Por lo tanto se puede considerar al satanismo como una filosofía atea.
En la Biblia Satánica se exponen los lineamientos, dogmas e incluso pecados que rigen la vida de los satanistas. Dichos lineamientos incluyen, entre otros, aceptar al hombre como un animal terrenal y racional, negar la existencia de cualquier dios externo así como cualquier fenómeno paranormal (fantasmas, hechicería, tarot, etc), buscar el desarrollo intelectual individual y principalmente la satisfacción de los deseos primarios de cada persona.
El satanista, examina su vida y hace un cambio en ésta. Se es satanista al momento de abandonar todo aquello que se cree perjudicial física, moral o espiritualmente (religiones que prometen una vida mejor después de la muerte, falsa moral, auto engaño hipócrita, abstinencia etc.), con el fin de liberarse de la ética que cree inútil y de la auto represión que las personas pudieran aplicarse a sí mismas (no confiar en ellas, sentirse débiles, baja autoestima, y muchas otras cosas).
Un Satanista jamás pone la otra mejilla, siempre devuelve lo que se da. La moral que plantea LaVey es, “Trata a los demás, como ellos te traten a ti”.Además de la autorregulación como factor básico del satanismo, también está el satisfacer los deseos primarios (los cuales recuerdan a los satanistas que siguen siendo animales con instintos y necesidades) sin importar nada ni nadie. LaVey también previno que los satanistas podrían excederse en su búsqueda de satisfacción personal y resultar perjudicados, La Biblia Satánica marca ciertas limitantes, aunque al final el límite lo impone el propio satanista. Dado que la Biblia Satánica estaba orientada a un público eminentemente cristiano, LaVey tuvo que explicar la diferencia entre satisfacción y ‘compulsión’.
El satanista, examina su vida y hace un cambio en ésta. Se es satanista al momento de abandonar todo aquello que se cree perjudicial física, moral o espiritualmente (religiones que prometen una vida mejor después de la muerte, falsa moral, auto engaño hipócrita, abstinencia etc.), con el fin de liberarse de la ética que cree inútil y de la auto represión que las personas pudieran aplicarse a sí mismas (no confiar en ellas, sentirse débiles, baja autoestima, y muchas otras cosas).
Un Satanista jamás pone la otra mejilla, siempre devuelve lo que se da. La moral que plantea LaVey es, “Trata a los demás, como ellos te traten a ti”.Además de la autorregulación como factor básico del satanismo, también está el satisfacer los deseos primarios (los cuales recuerdan a los satanistas que siguen siendo animales con instintos y necesidades) sin importar nada ni nadie. LaVey también previno que los satanistas podrían excederse en su búsqueda de satisfacción personal y resultar perjudicados, La Biblia Satánica marca ciertas limitantes, aunque al final el límite lo impone el propio satanista. Dado que la Biblia Satánica estaba orientada a un público eminentemente cristiano, LaVey tuvo que explicar la diferencia entre satisfacción y ‘compulsión’.
Después de haber leído esto, muchos se preguntarán porqué nos llamamos satanistas, y no simplemente ateos o humanistas. La respuesta a esta pregunta se puede resumir por medio de los siguientes puntos:
1.- la palabra “Satán” quiere decir originalmente “adversario” y el satanismo como una filosofía en la que cada individuo es su propio “dios” y “salvador”, es el adversario de las demás religiones e ideologías, en las cuales el individuo debe someterse a la voluntad de un dios, de una nación o de una clase social determinada.
2.-en la teología cristiana clásica “Satán” es considerado un símbolo del mundo material, de los placeres y del libre pensamiento más allá de cualquier dogma religioso, en oposición a dios, que representa el mundo espiritual (en el cual los satanistas no creemos), la negación de los placeres materiales y la sumisión de la razón.
3.-”Satán” ha sido visto siempre como el “dios” de la magia, de la cual los satanistas nos valemos para intentar influenciar los acontecimientos futuros según nuestra voluntad. El creer en el poder de la magia es otro de los puntos que nos distinguen de la mayoría de los ateos. En otro artículo explicare de manera más extensa los fundamentos de la magia satánica, la cual no tiene nada que ver con pactos de sangre, sacrificios de animales o personas, abusos físicos o sexuales, o cualquier otra aberración propia de charlatanes y desquiciados que creen que el satanismo es aquello que dicen las calumnias inventadas por las iglesias cristianas en nuestra contra.
Ashmeday ben-shakhar
Qué puede diferenciar a un satanista del resto de los hombres? El seguidor de Satán se levanta por las mañanas y trabaja ocho horas o más como el resto de la gente. Come, se asea y duerme al igual que todos los humanos. Tiene familia y amigos a los que quiere y por los que se preocupa.
Hasta ahora no hay nada especial en la vida de este satanista, no es un delincuente, ni un asesino, ni pasa su vida en aquelarres sacrificando niños en extraños rituales.Su primera diferencia está en su interior. Es libre. Se siente libre. Respira libertad por todos sus poros. Nada le ata ni esclaviza, su mente es libre y tan solo él marca las normas en su vida, sabiendo que él será el único responsable de sus errores.
Su segunda diferencia está en su sensibilidad para apreciar lo que la vida pone ante él. Si siente dolor, él lo sentirá como si fuera infinito. Si es placer, llegará a apreciarlo hasta sus más minúsculos matices. Cuando ame lo hará sin barreras ni límites, sin ataduras ni leyes, ni remordimientos. El satanista amará la vida disfrutando cada segundo del día, porque su vida es su mayor tesoro.
Su tercera diferencia está en su inagotable sed de conocimientos, de vivencias, de experiencias. Se relacionará con todas aquellas personas que desee y en las que pueda encontrar valores enriquecedores sin importarle su raza, sexo o condición social. Dará a los demás según él reciba y será fiel al amigo que sepa guardarle fidelidad.
Pero lo mejor de un satanista aflorará cuando se reúna con otros hermanos satanistas. Entonces, con absoluta libertad, podrá destapar sus deseos, emociones y pensamientos, sabiendo que nadie establecerá juicios morales y que sus hermanos y él compartirán juntos verdades que harán su vida más intensa y rica.
Como en todo, no existen reglas fijas que conduzcan los actos de los hombres, pero esta ha sido sinceramente la reflexión de un satanista sobre su propia existencia.
1.- la palabra “Satán” quiere decir originalmente “adversario” y el satanismo como una filosofía en la que cada individuo es su propio “dios” y “salvador”, es el adversario de las demás religiones e ideologías, en las cuales el individuo debe someterse a la voluntad de un dios, de una nación o de una clase social determinada.
2.-en la teología cristiana clásica “Satán” es considerado un símbolo del mundo material, de los placeres y del libre pensamiento más allá de cualquier dogma religioso, en oposición a dios, que representa el mundo espiritual (en el cual los satanistas no creemos), la negación de los placeres materiales y la sumisión de la razón.
3.-”Satán” ha sido visto siempre como el “dios” de la magia, de la cual los satanistas nos valemos para intentar influenciar los acontecimientos futuros según nuestra voluntad. El creer en el poder de la magia es otro de los puntos que nos distinguen de la mayoría de los ateos. En otro artículo explicare de manera más extensa los fundamentos de la magia satánica, la cual no tiene nada que ver con pactos de sangre, sacrificios de animales o personas, abusos físicos o sexuales, o cualquier otra aberración propia de charlatanes y desquiciados que creen que el satanismo es aquello que dicen las calumnias inventadas por las iglesias cristianas en nuestra contra.
Ashmeday ben-shakhar
Qué puede diferenciar a un satanista del resto de los hombres? El seguidor de Satán se levanta por las mañanas y trabaja ocho horas o más como el resto de la gente. Come, se asea y duerme al igual que todos los humanos. Tiene familia y amigos a los que quiere y por los que se preocupa.
Hasta ahora no hay nada especial en la vida de este satanista, no es un delincuente, ni un asesino, ni pasa su vida en aquelarres sacrificando niños en extraños rituales.Su primera diferencia está en su interior. Es libre. Se siente libre. Respira libertad por todos sus poros. Nada le ata ni esclaviza, su mente es libre y tan solo él marca las normas en su vida, sabiendo que él será el único responsable de sus errores.
Su segunda diferencia está en su sensibilidad para apreciar lo que la vida pone ante él. Si siente dolor, él lo sentirá como si fuera infinito. Si es placer, llegará a apreciarlo hasta sus más minúsculos matices. Cuando ame lo hará sin barreras ni límites, sin ataduras ni leyes, ni remordimientos. El satanista amará la vida disfrutando cada segundo del día, porque su vida es su mayor tesoro.
Su tercera diferencia está en su inagotable sed de conocimientos, de vivencias, de experiencias. Se relacionará con todas aquellas personas que desee y en las que pueda encontrar valores enriquecedores sin importarle su raza, sexo o condición social. Dará a los demás según él reciba y será fiel al amigo que sepa guardarle fidelidad.
Pero lo mejor de un satanista aflorará cuando se reúna con otros hermanos satanistas. Entonces, con absoluta libertad, podrá destapar sus deseos, emociones y pensamientos, sabiendo que nadie establecerá juicios morales y que sus hermanos y él compartirán juntos verdades que harán su vida más intensa y rica.
Como en todo, no existen reglas fijas que conduzcan los actos de los hombres, pero esta ha sido sinceramente la reflexión de un satanista sobre su propia existencia.
El papel de la mujer en las grandes religiones establecidas es por todos conocido, prácticamente nulo. La mujer en esas religiones siempre ha sido considerada como el origen de todo mal. Eva, Dalila y muchas más, forman parte de la innumerable lista de mujeres malditas. También en sus prácticas religiosas quedaron siempre en un segundo plano, como convidadas de piedra. La historia nos enseña que esto no siempre fue así. La mujer era la diosa tierra, madre y centro de todo lo existente, su fertilidad garantizaba el ciclo de las cosechas y la caza. Sus nombres fueron muchos: Isis la diosa egipcia cuyo culto llegó a la propia Roma. En Babilonia la diosa Isthar o Innana eran el centro de las grandes religiones mesopotámicas. La diosa Tiamat que existió antes de la propia creación, rodeada siempre por su corte de demonios según narra el Enuma Elish, relato de la creación de origen Cananeo y que fue tomado en parte por los primeros hebreos.
De aquellas épocas tan solo quedan los restos de rituales mágicos donde la mujer es el centro de toda la ceremonia. El satanismo a través de algunos ritos mágicos ha rescatado ese papel protagonista de las mujeres.
Fuera de las prácticas mágicas en lo que es la filosofía satánica, la mujer juega el mismo papel que el hombre, no existen diferencias en el satanismo por sexo o raza. La diferencia la marcan las personas con su ambición por adquirir conocimientos, por disfrutar de la vida, por su manera de ver y entender todo aquello que les rodea.
En el satanismo la única diferencia entre hombres y mujeres es la definición de sus propias individualidades. Las hermanas satanistas encuentran aquí el respeto y la admiración de sus hermanos.
De aquellas épocas tan solo quedan los restos de rituales mágicos donde la mujer es el centro de toda la ceremonia. El satanismo a través de algunos ritos mágicos ha rescatado ese papel protagonista de las mujeres.
Fuera de las prácticas mágicas en lo que es la filosofía satánica, la mujer juega el mismo papel que el hombre, no existen diferencias en el satanismo por sexo o raza. La diferencia la marcan las personas con su ambición por adquirir conocimientos, por disfrutar de la vida, por su manera de ver y entender todo aquello que les rodea.
En el satanismo la única diferencia entre hombres y mujeres es la definición de sus propias individualidades. Las hermanas satanistas encuentran aquí el respeto y la admiración de sus hermanos.
He aquí un extracto de La Biblia Satánica
“Hay razones lógicas por las cuales un Satanista no puede realizar tales sacrificios. El Hombre, como animal que es, es la divinidad por excelencia para el satanista. La forma más pura de la existencia carnal yace en los cuerpos de los animales y de los niños que no han crecido lo suficiente para negarse a ellos mismos sus deseos naturales. Pueden percibir cosas, cosas que el humano adulto no puede siquiera esperar hacerlo. Por ende, el satanista tiene a éstos seres en un sitio sagrado, sabiendo que puede aprender mucho de éstos magos por naturaleza del mundo.”
Los satanistas no adoran al Diablo, así que antes de que hagas juicios apresurados, primero averigua a qué te estás oponiendo.
“Hay razones lógicas por las cuales un Satanista no puede realizar tales sacrificios. El Hombre, como animal que es, es la divinidad por excelencia para el satanista. La forma más pura de la existencia carnal yace en los cuerpos de los animales y de los niños que no han crecido lo suficiente para negarse a ellos mismos sus deseos naturales. Pueden percibir cosas, cosas que el humano adulto no puede siquiera esperar hacerlo. Por ende, el satanista tiene a éstos seres en un sitio sagrado, sabiendo que puede aprender mucho de éstos magos por naturaleza del mundo.”
Los satanistas no adoran al Diablo, así que antes de que hagas juicios apresurados, primero averigua a qué te estás oponiendo.
Lo que creo es que Satán representa el llamado “lado oscuro” de la humanidad. Representa el egoísmo, la rabia, el deseo, el odio, el orgullo y todas las emociones que se tienen por negativas. Representa tener lo que quieres. No es “real”, en la forma que tú y yo somos reales, o el Presidente, o el tipo de la tienda que queda a la vuelta de la esquina. Sin embargo, lo que representa sí es real.
No creo en él de la manera en la que los Cristianos creen en su patética deidad. No adoro al Señor Oscuro, ni tampoco busco para que me de su diabólico sello de aprobación a la forma en como vivo mi vida. YO soy el único ser cuya opinión importa al final. Soy un Satanista porque me place serlo, no porque haya sido amenazado o expulsado de alguna religión.
Satán es tan real como yo mismo lo soy. Es decir, manifiesto un ethos satánico; Satán se hace real a través de mí. soy , - y es lo mejor (o peor?) que me pasa -la encarnación de Satán mismo.
¿Qué es un ethos Satánico? En su forma más sencilla, es egoísmo puro: total y único cuidado por mí mismo. A veces soy amable con otras personas porque quiero serlo, no porque alguien me esté diciendo que “debería serlo”. Podría lo mismo ser cruel con ellos, y con la misma base moral - fui cruel porque “quise” ser cruel con ellos.
Satán es real porque yo soy real, y somos uno. Su imperio es mi imperio y crece a diario, dándonos gran poder e influencia. La única “adoración” que hago es el darme gusto a mí mismo haciendo lo que quiero hacer.
No creo en él de la manera en la que los Cristianos creen en su patética deidad. No adoro al Señor Oscuro, ni tampoco busco para que me de su diabólico sello de aprobación a la forma en como vivo mi vida. YO soy el único ser cuya opinión importa al final. Soy un Satanista porque me place serlo, no porque haya sido amenazado o expulsado de alguna religión.
Satán es tan real como yo mismo lo soy. Es decir, manifiesto un ethos satánico; Satán se hace real a través de mí. soy , - y es lo mejor (o peor?) que me pasa -la encarnación de Satán mismo.
¿Qué es un ethos Satánico? En su forma más sencilla, es egoísmo puro: total y único cuidado por mí mismo. A veces soy amable con otras personas porque quiero serlo, no porque alguien me esté diciendo que “debería serlo”. Podría lo mismo ser cruel con ellos, y con la misma base moral - fui cruel porque “quise” ser cruel con ellos.
Satán es real porque yo soy real, y somos uno. Su imperio es mi imperio y crece a diario, dándonos gran poder e influencia. La única “adoración” que hago es el darme gusto a mí mismo haciendo lo que quiero hacer.
“¡SOY UN SATANISTA, INCLINAOS, PORQUE SOY LA PERSONIFICACIÓN MAS ALTA DE LAVIDA HUMANA!”